Elmundo onírico,se rebela apasionadamente interesante y sorprendente, mas que nada por el alcance mental que puede llegar a tener en nuestra vida real. La mayoría de nosotros espera soñar lo que despiertos deseamos pero no logramos alcanzar. Un ejemplo: El ser humano no está hecho para volar sin embargo nada nos causa mas felicidad que despertar tras una noche plagada de sueños en los que de una manera u otra vencemos la fuerza de la gravedad y despegamos a voluntad, sobrevolando lugares a los que nunca nos ha llevado nuestra vida o camino. Volar es liberación, es la rotura de los vínculos que nos atan a costumbres, tradiciones y supercherías, la mayor parte de estas nos han sido impuestas por nuestro entorno y estilo de vida. Volar es sensacional, pero no podemos en apariencia controlar este acto. Digo en "apariencia", porque en realidad podemos entrar despiertos en la fase de sueño Rem. Con un control de la respiración y una sesión de relajación antes de dormir preparamos nuestra mente para soñar aquello que deseamos. Y no solo volar....Cualquier cosa es posible con solo desearlo, en ese momento los sueños se mezclan con nuestra realidad visible haciendo posible lo imposible. Solo teneis que probarlo y ya me contareis.
